25 web pages
El 60% de las personas que terminan una relación amorosa bloquean a su ex en redes sociales en el primer mes, según datos recopilados por plataformas de análisis digital en 2024. En España, este porcentaje sube al 65% entre jóvenes de 18 a 30 años. Por otro lado, el 40% restante prefiere mantener el contacto virtual, ya sea por curiosidad, nostalgia o simple indiferencia. El 15 de marzo de 2025, un estudio de la Universidad de Barcelona reveló que quienes cortan toda comunicación digital tras una ruptura reportan un 20% menos de estrés emocional en las primeras semanas.
El impacto de bloquear a tu ex
Cortar el acceso a las publicaciones, fotos o mensajes de una expareja cambia la dinámica emocional. Ver una historia en Instagram o un estado en WhatsApp puede disparar recuerdos que dificultan avanzar. Cada notificación se convierte en un recordatorio de lo que ya no está. Los psicólogos llaman a esto «exposición intermitente», un fenómeno que mantiene viva la herida emocional al no permitir que el cerebro procese la pérdida de forma estable.
Beneficios de cortar el contacto
Eliminar la posibilidad de interacción tiene efectos inmediatos. La ansiedad por saber qué hace el otro disminuye, y el tiempo dedicado a revisar perfiles se reduce drásticamente. Un dato curioso: quienes bloquean a su ex pasan, en promedio, 3 horas menos al día en redes sociales durante el primer mes post-ruptura, según un análisis de hábitos digitales en Madrid. Esto deja espacio para actividades que refuerzan la autoestima, como hobbies o ejercicio.
La perspectiva de no bloquear
Mantener el contacto virtual también tiene sus razones. Alrededor del 25% de las personas que no bloquean a su ex dicen que lo hacen para preservar una relación amistosa. Otros, cerca del 10%, admiten que buscan una señal de arrepentimiento o una oportunidad de volver. En estos casos, la decisión depende de cómo terminó la relación: si fue un acuerdo mutuo, la convivencia digital puede ser menos dolorosa.
Riesgos de seguir conectados
El problema surge cuando la ruptura no fue amistosa. Ver publicaciones felices o indicios de una nueva vida amorosa puede generar celos o tristeza. Una encuesta reciente en Valencia mostró que el 70% de quienes no bloquean a su ex experimentan altibajos emocionales al ver contenido nuevo de esa persona. Esto alarga el proceso de duelo, manteniendo a muchos atrapados en un ciclo de comparación.
Opinión experta
La psicóloga Laura Gómez, especialista en relaciones y duelo amoroso con 15 años de experiencia, señala: «Bloquear a un ex no es un signo de debilidad, sino una herramienta de autocuidado. Si la relación dejó heridas profundas, cortar el acceso digital ayuda a establecer límites claros y acelera la recuperación. Sin embargo, si ambos han cerrado el capítulo con madurez, no hay necesidad de hacerlo; la clave está en la intención detrás de la decisión».
Comparación entre opciones
Para aclarar las diferencias, aquí va una tabla basada en experiencias comunes:
| Aspecto | Bloquear | No bloquear |
|---|---|---|
| Impacto emocional inicial | Alivio rápido, menos ansiedad | Posible tristeza o curiosidad |
| Tiempo de recuperación | Más corto (semanas) | Más largo (meses) |
| Interacción futura | Limitada o nula | Posible amistad o tensión |
Factores a considerar
La decisión varía según la persona. Si hay hijos en común, el bloqueo total puede no ser práctico; un 30% de padres separados en España optan por mantener una línea abierta solo para temas logísticos. En cambio, si la relación fue tóxica, el 85% de los afectados elige cortar todo vínculo digital para proteger su paz mental.
Estrategias intermedias
No todo es blanco o negro. Algunos prefieren alternativas como silenciar notificaciones o dejar de seguir sin bloquear. Estas opciones, usadas por el 18% de los usuarios de redes sociales tras una ruptura, ofrecen un equilibrio entre distancia y flexibilidad. Por ejemplo:
- Silenciar historias para evitar contenido espontáneo;
- Dejar de seguir, pero mantener la opción de retomar contacto después.
Cada caso tiene sus matices. La elección depende de cómo te sientas al imaginar a esa persona en tu pantalla.